sábado, 9 de marzo de 2013

La Memoria de Chávez.
























La memoria es un asuto propio, de cualquier manera nos planteamos permanecer cercanos a momentos pasados de la vida, algunos incluso se reprimen y se ocultan. ¿Qué pasará con la memoria de Hugo Chávez Frías, Comandante de la Revolución Bolivariana? 

Las innumerables personas que en estos días intentan dar un adiós a los restos de Chávez, la gran carga mediática que cubre cada detalle de Venezuela, todos los presidentes que han asistido al funeral, que por hoy superan la treintena y más asuntos parecen demostrar que su Comandante será recordado. Mientras tanto hay noticias, relatos, fotografías, chismes, conspiraciones y más, con dar "Enter" en cualquier red social. Ahora la plataforma 2.0, de la red, permite hacer un ejercicio de construcción histórica colectiva. 

Demarcando esta opinión, todos hemos revisado la red, o los medios tradicionales para saber qué pasó, qué pasa y qué pasará en Venezuela, pero uno se encuentra de todo. Uno espera mentes crírticas, corazones humanos, reflexión sobre los hechos y accionar coherente, pero han existido un montón de comentarios y opiniones sumamente desatinadas. Esos comentarios, lejos de causar ira, alegría o tristeza, causan gracia, ante todo por su anacronía, sus pobres argumentos, su desacierto en la coyuntura histórica, la lectura del personaje desde caprichos y no desde sus contradicciones o  una mirada sesgada desde el fundamentalismo. 

Casos como "castigo divino", "llorón", "muerto hace un mes", "muerto al medio día", "murio dictador", "celebraciones en Miami", son solo algunos de los casos más absurdos y fuera de lugar en un período de luto para innumerables seres humanos, hombres, mujeres, ancianos, ancianas, niños, niñas y más que hoy lloran la partida de otro ser humano, uno histórico, uno que divide la historia, que cambia las relaciones sociales en su país y en el mundo, uno que redefine Latinoamérica frente a la geopolítica y el mundo multipolar en el que hoy nos encontramos. 

Queramos o no aceptarlo Hugo Chávez Frías alteró el mundo. Nunca antes un presidente latinoamericano había llamado "el diablo" a George Bush, por su política guerrerista, imperial y armamentista, nunca antes un presidente respondió desde nuestra historia, ancestros e identidad a un ¡CÁLLATE! del Rey de España. Ese es el hombre que acaba de partir de esta vida, un hombre que comprometió su palabra hasta el último día de su vida y coherentemente murió luchando. Tanto se quejan de que si Chávez hizo o no hizo esto o lo otro, recuerden, cumplió, tan distinto a otros personajes que intentarosn ser una copia al carbón y al poco tiempo se desfiguraron, nos apuñalaron y casi nos venden enteros, "o cambiamos al Ecuador o morimos en el intento", "de aquí solo me sacan con los pies por delante" han sido típicos. 

Quienes buscamos la definitiva liberación de los pueblos, de todas las identidades, de las culturas, de los individuos, debemos asumir esa lucha hasta las últimas consecuencias, pero siendo claros en la crítica de las contradicciones, entendiendo el momento histórico, acompañando procesos que consideremos justos y trabajando mancomunadamante. Hay temas en los que estamos de acuerdo, hay temas en los que no, pero si dividimos la lucha, inclusos en lo que tenemos en común, simplemente seguiremos bajo el actual sistema de opresión y consumo. 

La memoria de Chávez debe colocarnos en que, bajo sus limitaciones, la geopolítica actual y en la coyuntura genaral del mundo, él mostro que organizados, internacionalistas, libres y con conciencia de clase podemos pensar y hacer distinto.

En la memoria del pueblo Venezolano, de toda la gente que salió de la pobreza extrema, en la memoria de aquellos que aún sueñan con nuevas victorias de Bolívar, en la de las y los liberados en este proceso, en la memoria de quienes somos críticos con el sistema y empujamos todos los procesos por la liberación definitiva, en la memoria de Evo, de Mujica, de Fidel, en la de Aleida Guevara y Silvio Rodríguez, en la de los y las guaguas, en la memoria de las y los abuelos, en la memoria de los creyentes y de los ateos, en la memoria de quienes soñaban a una América Latina frontal contra el imperio, en la UNASUR, en la CELAC y ALBA, en la memoria de los hermanos Palestinos, Sirios, Iraníes, Colombianos, Kurdos está Hugo Chávez como un hermano, como un compañero. Pero también, esa memoria, es una espina en el zapato para el Statu Quo. 

CON LA MEMORIA DEL CORAZÓN Y LA DE LA MENTE, HASTA SIEMPRE HUGO CHÁVEZ FRÍAS.

Ante todo la LIBERTAD,

El G(A)BU!